domingo, 2 de septiembre de 2012

Capitulo 33: Carta y un gran regalo

Carta:
Quiero que lo sepas, no te quiero en pasado, no te quiero en presente, ni te quiero en futuro, es un amor sin tiempo, tampoco tiene distancias, es simplemente amor puro, cargado de ilusiones, lleno de promesas que no deben cumplirse porque ya se cumplieron todas al conocerte. 

Te quiero, como dos palabras que forman una sonrisa en tus , como dos cielos llenos de colores reflejados en tus ojos, como dos palabras infinitas que no deben dejar de sentirse. 

Quererte, en realidad es un premio, desconozco si te merezco, al menos lucho por merecerte, pero es un premio, es un que cualquier persona debería recibir, pero que sólo tengo yo. 


PD: Ábreme la puerta, dejame explicarme, porfavor


Estoy medio llorando, espero que sea Dani, no doy ni medio segundo para pensar en abrir o no la puerta, voy corriendo hacia allí, la abro

- Sabia que abrirías la puerta - Es Dani, esta guapísimo, de traje, con una caja, rojo, gigante y..... ¿agujeros?
- Pero ¿Dani?
- Felicidades pequeña - Me ha vuelto a hacer llorar, pero esta vez de felicidad.
No le respondo me quedo en frente como una tonta, llorando, sin moverme, sin gesticular apenas
- Anna, perdóname, en serio, debería haberte llamado, estar contigo, te he dejado sola toda la noche, perdóname - Se le ponen los ojos llorosos al decirlo
- ¿Que estabas haciendo? - Me pongo de brazos cruzados, seria.
- Se que es una sorpresa, pero sino te lo digo ya, no me vas a querer ver en la vida - Sigo mirándole, no respondo
- Anna, espero que con todo lo que ha preparado el equipo para los dos, no dejes de sonreír en las próximas 20 horas que quedan del día - El deja la caja en el suelo, me cojee en brazos mientras me besa, cierra la puerta con el pie
- Dani, no me vuelvas a dejar sola por la noche, por favor - Me deja en el sofá sentada, sigue abrazándome
- Por favor, dime que no has tenido pesadillas
- No suelo estar despierta todos los días a las cuatro
- Dios, como me odio ahora mismo
- ¿Que es esa caja, Dani?
- Te recuerdo que es tu cumpleaños
Me trae la caja al sillón, la desenvuelvo con cuidado, debajo de el papel, es una caja de cartón grande, pero sigue siendo una caja de cartón
La destapo y se me queda la mejor cara de tonta que ha podido ser fotografiada, no en este caso, claro
- Hay, que me muero, es el cachorrito mas cuqui del mundo
- Es un Samoyedo, se va a hacer enorme, pero siempre sera mono y te protegerá - Lo cojo con mucho ciudadito, como si fuera un bebe, mi bebe
- ¿Como le quieres llamar?
- Ya se, se llamara.....


Bueno como siempre gracias por leerlo, a los dos o tres comentarios subiré el siguiente, recordarlo, SED FELICES

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